La construcción de una casa o edificio no es un asunto menor o una tarea que cualquier persona pueda hacer. Los arquitectos e ingenieros civiles deben tener en cuenta diversos aspectos antes, durante y después de la edificación.

Aquí te compartimos algunos puntos importantes a considerar y que, sobre todo, ayudarán a que la estructura sea más resistente en caso de un sismo.

Cimientos: estos son clave en la flexibilidad y resistencia de los edificios. El tipo de suelo determinará una cimentación específica (profundidad, forma, tamaño, etc.), de ahí que sea necesario un estudio de suelo antes de iniciar la construcción.



Estructuras rígidas en planta: contemplar la mayor cantidad de muros estructurales en una obra mejora y refuerza las bases, así como la estabilidad y resistencia ante cualquier movimiento sísmico.

Calidad de materiales: es claro que mientras mejor sean los materiales, más segura será la obra de construcción final. También es indispensable una buena elección de materiales ya que las empresas buscan fabricar mejores productos.

Altura: ante un sisma, la altura juega un papel muy importante. Es necesario conocer los reglamentos locales para la construcción de edificios, casas y comercios en determinadas zonas.

Simetría: para lograr cualquier punto de equilibrio, el inmueble debe tener las mismas dimensiones en ambos ejes. Cuando un edificio no es simétrico aumenta la posibilidad de una torsión en la planta, haciéndolo más vulnerable a un terremoto.

Fuente: muyinteresante.es